PROMOCION DE LA ALIMENTACION SALUDABLE
El proyecto de ley de promoción de la alimentación saludable busca proteger a los menores del "bombardeo" de la publicidad televisiva de comida chatarra, de la cual un 66 por ciento está destinada a los programas infantiles, afirmó hoy el viceministro de Salud, Percy Minaya.
Sostuvo que el Estado tiene el deber y el derecho de proteger a los menores de una publicidad que es constante y persistente, ya que a diario se transmiten en Perú 335 avisos de promoción de esos comestibles, según cifras del Consejo Consultivo de Radio y Televisión (Concortv).
Esto equivale a un tiempo continuo de 68 horas al mes y representa una inversión diaria de dos millones de nuevos soles sólo en televisión, dijo Minaya a la Agencia Andina.
Lamentó que la Asociación Nacional de Anunciantes (ANDA) pretenda comparar el aporte de azúcares naturales y fibra de las frutas con los productos procesados que exceden todos los límites permitidos en glucosa, sal y grasas trans.
“En el colmo del abuso se pretende decir que es un mito que los alimentos naturales son buenos y quieran equipararlos con los productos industrializados. Es algo nefasto”, manifestó el funcionario, quien señaló que la actitud del Ministerio no puede ser otra que defender el proyecto.
Agregó que el Estado tiene toda una política de promoción de la industria y del desarrollo, pero eso no justifica la elaboración de productos que puedan atentar contra la salud de la niñez.
Minaya precisó que en este caso no se habla de alimentos, sino de productos comestibles no saludables, dado que, por ejemplo, en el caso de una fiesta infantil donde abundan las golosinas, éstas triplican y hasta cuadruplican las cantidades de azúcares y calorías que requieren los menores en un solo día.
Según especialistas del Centro Nacional de Alimentación y Nutrición del Instituto Nacional de Salud, la ingesta de un solo vaso con gaseosa o néctares envasados equivale al consumo de cuatro o cinco cucharaditas de azúcar. Además, las golosinas y otros dulces tienen aditivos que pueden generar problemas alérgicos.
El viceministro agregó que si bien es positivo que la industria anuncie una autorregulación, el Estado no puede renunciar a su labor fiscalizadora y reguladora.
“¿Quién protege la salud y la mente de los niños de la gran presión de la propaganda que busca convertirlos en consumidores de comestibles no saludables? Tiene que ser el Estado. Aquí no hay la intención de ponerle obstáculos al comercio, sino de proteger la salud pública”, aclaró.
=============================================
En el contexto de la situación de salud del país y el creciente aumento de las enfermedades crónico degenerativas es apropiado que el MINSA se compre este pleito que tiene a poderosos oponentes, sin embargo resulta una batalla relativamente poco significativa, los factores en juego más importantes son la educación en salud y nutrición, la educación de los padres, el fortalecimiento de la puericultura y las capacidades de crianza, los periodos más prolongados de trabajo o el politrabajo del padre y / madre (en que los médicos son expertos), los tiempos efectivos de dedicación a los hijos y a la familia, por ejemplo almorzar o comer en familia.
Es un tema que debe enriquecer la agenda política en salud y no distorsionarla ya que puede ser instrumentalizada como cortina de humo.
Alberto Tutaya
domingo, mayo 27, 2012
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario