Centenario de
la Primera Guerra Mundial, también conocida como la Gran Guerra
la Primera Guerra Mundial, también conocida como la Gran Guerra
Fue una guerra mundial, localizada principalmente en Europa, que comenzó el 28 de julio de 1914 y finalizó el 11 de noviembre de 1918.
Hasta el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, esta guerra era llamada Gran Guerra o simplemente Guerra Mundial.
En Estados Unidos originalmente se la nombró como Guerra Europea.Más de 9 millones de combatientes perdieron la vida, una cifra extraordinariamente elevada, dada la sofisticación tecnológica e industrial de los beligerantes, con su consiguiente estancamiento táctico.
Está considerado el quinto conflicto más mortífero de la historia de la Humanidad.
Tal fue la convulsión que provocó la guerra, que allanó el camino a grandes cambios políticos, incluyendo numerosas revoluciones con un carácter nunca antes visto, en varias de las naciones involucradas.
Detonante del conflicto
Atentado de Sarajevo
El evento detonante del conflicto fue el asesinato del archiduque Francisco Fernando de Austria y su esposa, Sofía Chotek, en Sarajevo el domingo 28 de junio de 1914 a manos del joven estudiante nacionalista serbio Gavrilo Princip, miembro del grupo serbio "Joven Bosnia", ligado al grupo nacionalista Mano Negra, que apoyaba la unificación de Bosnia con Serbia. Francisco Fernando era el heredero de la corona austro-húngara después de la muerte de su primo, Rodolfo de Habsburgo (en 1889) y de su padre Carlos Luis de Austria (en 1896). Su asesinato precipitó la declaración de guerra de Austria contra Serbia que desencadenó la Primera Guerra Mundial.
El Imperio austrohúngaro exigió, con el apoyo del Imperio alemán, investigar el crimen en territorio serbio, ya que consideraba que la organización paneslavista Mano Negra tenía conexión con los servicios secretos de ese país. El Imperio Austrohúngaro dio un ultimátum el 7 de julio a Serbia, la que con apoyo ruso no aceptó todas las condiciones impuestas, en particular la participación de policías austríacos en investigaciones en territorio serbio.
Ante dicha negativa, el 28 de julio de 1914, Austria-Hungría declaró la guerra a Serbia. Acto seguido el 29 de julio Rusia ordenó la movilización general. En función de las alianzas militares, el 1 de agosto, Alemania le declaró la guerra a Rusia, al considerar la movilización como un acto de guerra contra Austria-Hungría. Ante esto, y en virtud, de la alianza militar franco-rusa de 1894 Francia tomó algunas medidas de precaución en sus fronteras. Alemania, al conocer la agitación que reinaba en Francia a causa del inesperado ataque contra Serbia y la movilización rusa le declaró la guerra a Francia el 3 de agosto.
The dead were and are not.
Their place knows them no more and is ours today.
Yet they were once as real as we, and we shall tomorrow be shadows like them.
the historian G. M. Trevelyan
World War I could be said to have begun in Sarajevo on June 28, 1914, with the assassination of Archduke Franz Ferdinand and his wife, Sophie, by a young nationalist seeking a greater Serbia. The four and a half years that followed, as the war spread throughout Europe, the Middle East and Asia, reshaped the modern world in fundamental ways.
The war destroyed kings, kaisers, czars and sultans; it demolished empires; it introduced chemical weapons, tanks and airborne bombing; it brought millions of women into the work force, hastening their legal right to vote. It gave independence to nations like Ukraine, Poland and the Baltic countries and created new nations in the Middle East with often arbitrary borders; it brought about major cultural changes, including a new understanding of the psychology of war, of “shell shock” and post-traumatic stress.
It also featured the initial step of the United States as a global power. President Woodrow Wilson ultimately failed in his ambitions for a new world order and a credible League of Nations, setting off much chaos with his insistence on an armistice and his support for undefined “self-determination.” And the rapid retreat of the United States from Europe helped sow the ground for World War II.
Historians still squabble over responsibility for the war. Some continue to blame Germany and others depict a system of rivalries, alliances and anxieties, driven by concerns about the growing weakness of the Austro-Hungarian and Ottoman Empires and the growing strength of Germany and Russia that was likely to produce a war in any case, even if there was some other casus belli.